Un estudio presentado en la Sociedad Americana de Nutrición sugiere que las mujeres que consumen entre una y tres tazas diarias de café con cafeína en la mediana edad tendrían mayores probabilidades de llegar a la vejez con buena salud física, mental y cognitiva.
Diversos estudios han vinculado el consumo moderado de café con menos riesgos de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares. Ahora, una investigación de la Facultad de Medicina y del Departamento de Ciencias de la Nutrición de la Universidad de Toronto señala que beber una a tres tazas de café con cafeína al día por mujeres de entre 50 y 60 años tendrían más probabilidades de llegar a una edad avanzada sin enfermedades crónicas graves y con una buena salud cognitiva, física y mental.
La autora principal del estudio, la doctora Sarah Mahdavi, afirma que el consumo moderado de café con cafeína durante la mediana edad se asocia con una mayor probabilidad de envejecimiento saludable 30 años después.
Los investigadores analizaron datos dietéticos de más de 47.000 mujeres que tuvieron un seguimiento durante 30 años para comprender sus tasas de muerte y enfermedad. Los efectos se encontraron especialmente en el café con cafeína. No se encontró el mismo vínculo para el té o el café descafeinado. En tanto, consumir más refrescos con cola u otras bebidas gaseosas con cafeína se asoció con una menor probabilidad de envejecer saludablemente.
El estudio también es observacional, lo que significa que tiene limitaciones para analizar una relación directa de causa y efecto. La nueva investigación solo puede mostrar que un comportamiento y un resultado tienden a ocurrir juntos con mayor probabilidad.
Los investigadores tomaron eso en cuenta y ajustaron por otros factores que podrían relacionar el consumo de café con un envejecimiento saludable, como el estilo de vida, diferencias demográficas y otras diferencias dietéticas, pero aún es posible que exista otra variable en juego.
No obstante, los expertos advierten que el café puede apoyar la longevidad, pero no es una receta universal, especialmente para las mujeres. Los cambios hormonales influyen en cómo se metaboliza la cafeína, por lo que los beneficios dependen del momento, la biología y la salud individual.
La testosterona inhibe una enzima hepática crucial para descomponer la cafeína, lo que significa que la cafeína puede durar más tiempo en el cuerpo de algunas personas, especialmente aquellas que atraviesan transiciones hormonales como la menopausia o el embarazo o que usan anticonceptivos orales.
“El consumo moderado de café con cafeína puede ser parte de una dieta saludable para muchos adultos, pero esto no debe tomarse como una recomendación general para que todos comiencen o aumenten el consumo de café con el objetivo de vivir más tiempo”, recalca la doctora.