En Chile, el cáncer cervicouterino se ha transformado en la segunda causa de muerte en mujeres entre 20 y 44 años.
Hoy se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino; una acción que busca concientizar e informar a la población sobre la importancia de efectuarse controles ginecológicos periódicos, para evitar esta enfermedad.
En Chile, el cáncer cervicouterino se ha transformado en la segunda causa de muerte en mujeres entre 20 y 44 años. En la mayoría de los casos, se debe al virus del papiloma humano (VPH), una de las infecciones de transmisión sexual más comunes y causante de casi el cien por ciento de los tumores de cuello de útero.
Según datos del Ministerio de Salud, se estima que entre el 20% y 30% de las mujeres menores de 30 años es portadora del virus y que el 80% de ellas desarrollará la infección en algún momento de su vida.
De acuerdo con los especialistas, este factor de riesgo del cáncer es altamente prevenible mediante la vacunación, que debe extenderse a los hombres, ya que son contagiadores del virus.
La infección por VPH causa anomalía en el desarrollo de los tejidos localizados principalmente en el área anogenital y también en el tracto aero-digestivo, tanto en mujeres como en hombres.
Estas anormalidades pueden ser pre-cancerosas, cancerosas o papilomas y condilomas. La mayoría (70% a 90%) de las infecciones por VPH de alto y bajo riesgo son asintomáticas, es decir, no ocasionan molestias y se resuelven espontáneamente en 1 o 2 años.
Sin embargo, si la infección persiste, podría favorecer la aparición de un cáncer del cuello del útero. Un 99,7% de los casos puede detectarse de manera temprana y así aumentar la supervivencia de las pacientes. Las guías internacionales y las del ministerio de Salud en Chile, indican que las mujeres deben realizarse el examen PAP cada tres años a partir de los 25 años.
En el caso del cáncer del cuello del útero, en los últimos años se ha comenzado a implementar otro examen para detectar el virus del papiloma humano, un PCR -como el que se usa para el Coronavirus-, que es mucho más sensible.
Por lo general, no hay signos o síntomas del cáncer de cuello uterino temprano, pero algunas pacientes si presentan algunos síntomas:
– Manchas de sangre o sangrado leve entre o después de la menstruación.
– Dolor al mantener relaciones sexuales.
– Tener un sangrado menstrual más largo y abundante de lo normal.
– Sangrar con la actividad sexual o durante el examen pélvico en la consulta del ginecólogo.
– Aumento de la secreción vaginal.
– Sangrado después de la menopausia.
– Infección vaginal persistente.