Alerta Covid 19

Costos socioemocionales en escolares chilenos producto de la pandemia

En 2020, se generaron más problemas en relación con dificultades atencionales y de tipo ansioso-depresivo, aislamiento, problemas sociales y de pensamiento en los estudiantes del país.

La pandemia ha generado un impacto en la salud mental de la población en general, principalmente en las niñas y niños. El confinamiento en el hogar y la incapacidad de asistir al colegio han sido los grandes factores que explican este fenómeno social.  

Con el objetivo de investigar sobre los efectos que esto ha generado en los estudiantes chilenos, el Centro Justicia Educacional de la Universidad Católica realizó un estudio para explorar el impacto socioemocional en los alumnos  con y sin necesidades educativas especiales (NEE), en el contexto nacional de pandemia.

La investigación abarcó a padres y apoderados de 346 niños y adolescentes, de entre 4 y 18 años, quienes respondieron durante octubre 2020 el Cuestionario de Conducta Infantil acerca de los problemas emocionales y de conducta de sus hijos.

Catalina Santa Cruz, doctora en psicología, investigadora asociada de la Línea de Inclusión de la Discapacidad de CJE y directora del estudio, señala que los resultados de este estudio pudieron ser comparados con mediciones del período 2018-19, para una muestra específica de participantes que cursan segundo básico, observándose mayores problemas para todos los alumnos y alumnas durante la pandemia.

La investigación indicó que el año 2020 hubo más problemas en relación con dificultades atencionales y de tipo ansioso-depresivo, aislamiento, problemas sociales y de pensamiento.

“Los resultados del estudio dan cuenta de la necesidad de considerar estas consecuencias mientras la pandemia exista y durante el proceso de reintegración. Además, se deben generar estrategias de prevención y tratamiento de las dificultades emocionales y conductuales, que consideren la relación que hay entre las condiciones de salud mental los adultos y sus hijos”, agrega la especialista.

Asimismo, recomienda considerar estas necesidades de forma urgente, pues podrían llegar a afectar de manera permanente el desarrollo emocional de determinados grupos de niños, lo que a su vez puede generar una serie de consecuencias negativas a nivel de su desarrollo social y cognitivo, aumentando aún más las brechas existentes entre aquellos con y sin necesidades educativas especiales.