Alerta Covid 19

Inmunidad híbrida contra las infecciones

 La evidencia sugiere que las vacunas de ARNm provocan una respuesta de células B de memoria más fuerte contra Covid 19 que otros tipos de vacunas.

En octubre de 2020, un equipo de virólogos de la Universidad Rockefeller de Nueva York se embarcó en un proyecto para tratar de anticipar qué formas peligrosas de Covid 19 podrían surgir en el futuro.

Los científicos estaban muy conscientes de que el virus mutaría para volverse más infeccioso y virulento. Por ello,  su objetivo era crear una versión artificial de la proteína de espiga de Covid 19 -la proteína que el virus usa para penetrar en las células- que pudiera evadir todos los tipos conocidos de anticuerpos protectores que se habían encontrado en la sangre de los sobrevivientes de la enfermedad.

Durante 12 meses, analizaron diferentes combinaciones de mutaciones en la superficie de la proteína de espiga hasta que encontraron un conjunto de 20 que parecían hacerla particularmente resistente.

Según el artículo publicado en BBC News, para probar esta «Frankenspiga» cultivada en un laboratorio, la insertaron en lo que los virólogos llaman un pseudotipo de virus, uno que ha sido diseñado para que no tenga suficiente material genético para replicarse, lo que permite a los científicos modificarlo y comprender cómo se comporta sin ningún riesgo de que se escape.

Inicialmente, las cosas se desarrollaron como se esperaba. Cuando los virólogos expusieron su virus recién diseñado a muestras de sangre tomadas de personas que se habían recuperado de Covid 19 o que habían sido vacunadas contra la enfermedad, eludió hábilmente todos los anticuerpos.

Pero entonces sucedió algo sorprendente. Cuando lo probaron en la sangre de personas que se habían recuperado de Covid 19 en 2020 y fueron vacunadas muchos meses después, sus anticuerpos pudieron unirse al virus y neutralizarlo por completo.

Superinmunidad

Durante los últimos cuatro meses, los hallazgos del equipo de Rockefeller se han observado repetidamente en la vida real. Las personas que se recuperaron de una infección por Covid 19 en el pasado y luego se vacunaron parecen ser más resistentes a las nuevas variantes, desde la delta hasta la ómicron. Los inmunólogos tomaron muestras de sangre de estos individuos y descubrieron que tenían una especie de «superinmunidad» denominada inmunidad híbrida por la comunidad científica.

Estas personas no solo producen niveles astronómicamente altos de anticuerpos, mucho más que aquellos que acaban de recibir una doble vacuna y la de refuerzo, sino una gama mucho más diversa de anticuerpos, que tienen una mayor probabilidad de encontrar puntos débiles virales, incluso en una forma altamente mutada de Covid 19.

La razón por la que estas personas muestran respuestas tan potentes se debe a una faceta del sistema inmunológico que ha sido pasada por alto durante mucho tiempo: un tipo de glóbulo blanco conocido como células B de memoria.

Estas células se generan en respuesta a un virus y lo recuerdan en caso de que el patógeno regrese alguna vez. A través de investigaciones sobre el VIH, el ébola, las enfermedades autoinmunes y ahora la Covid 19, se está comenzando a comprender cuán vitales son para determinar las  respuestas tanto a las infecciones como a las vacunas.

 La evidencia sugiere que las vacunas de ARNm provocan una respuesta de células B de memoria más fuerte contra Covid 19 que otros tipos de vacunas. Esto es importante porque, si bien las células B no se unen a los virus, pueden convertirse en células plasmáticas cuando detectan una amenaza.

Estas células plasmáticas producen anticuerpos dirigidos contra el mismo antígeno viral que su célula B nativa. Un grupo menos diverso de células B significa menos anticuerpos que podrían ser capaces de neutralizar el virus.

Una de las enseñanzas del Covid 19 es que las personas que tienen una mayor diversidad de células B están mucho más equipadas para defenderse de un nuevo patógeno y, en particular, de las variantes en constante evolución del virus.

Esto se ve afectado por la edad, las condiciones de salud subyacentes y también simplemente la genética. «Todos tendrán un repertorio diferente de células B con las que responderán a cualquier infección», señala Ali Ellebedy, profesor asociado de patología e inmunología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington. «Incluso si tienes hermanos, tendrán diferentes respuestas de células B».

Las personas que han sido vacunadas contra Covid 19 y expuestas al virus pueden tener una «inmunidad híbrida» beneficiosa. Durante los últimos seis meses, se han estado estudiando las sutiles diferencias entre la infección natural y la vacunación.

A través del aislamiento de cientos de células B de memoria de personas que han sido infectadas o vacunadas en varios momentos, se descubrió que la infección natural parece dar como resultado células B de memoria que luego evolucionan continuamente.

Esto significa que producen anticuerpos que tienen más probabilidades de proteger contra nuevas variantes del virus. La principal revelación para los inmunólogos es que este efecto ocurre con mayor fuerza cuando las personas han sido infectadas y luego vacunadas.

Vacunas

Ahora los científicos buscan comprender si es posible ajustar los regímenes de vacunación de tal manera que las inyecciones por sí solas puedan provocar esta respuesta de inmunidad híbrida.

Si es así, esto podría proporcionar a la humanidad un arma crucial contra las nuevas variantes de Covid 19 y futuras pandemias.

 Covid 19 ha brindado una oportunidad única para comparar diferentes tecnologías de vacunas para el mismo virus buscando la respuesta inmune más duradera y efectiva, al observar cómo responden las células B de memoria con el tiempo.

Hasta ahora, parece que las vacunas de ARN mensajero, como las producidas por Pfizer, Moderna y Novartis, parecen funcionar mejor, aunque los investigadores todavía están tratando de descifrar exactamente por qué.

El intrigante descubrimiento de la inmunidad híbrida en los últimos meses ha llevado a los científicos a analizar diferentes regímenes de vacunas contra Covid 19, para ver si mezclar y combinar varias inyecciones puede provocar una respuesta inmunológica igualmente poderosa.

Los primeros datos concretos sobre esto comenzarán a surgir más adelante en 2022 y podrán ayudar a comprender cómo usar mejor las vacunas y las inyecciones de refuerzo contra otros virus, desde la influenza hasta el VIH.